Lot Essay
Nombre fundamental entre los artistas españoles que se integraron en la llamada Escuela de París; ciudad donde desarrolló lo esencial de su carrera artística. Allí fue acogido por Picasso, quien le abrió las puertas del medio artístico. Su segundo encuentro decisivo fue con el escultor Henry Laurens.
Este bronce representa un desnudo femenino, eje central en toda la producción del artista. Bronce de la etapa final del escultor, etapa en la que se extraen las pautas básicas de su actuación que definen las vertientes fundamentales de su esplendorosa poética crepuscular. Asume en su totalidad la anatomía del cuerpo femenino, donde se diluyen los rasgos de la cara, con alusión a los modelos arqueológicos del arte ibérico. Figura sentada, piernas dobladas y gesto de la mano; curvas blandas como la que traza un sinuoso y alargadísimo cuello que recoge la esfera de la cabeza dando una gracia particular a esta escultura, enmarcándose en una pose característica de Lobo. El cuerpo gira suavemente con posición ladeada de las piernas, repartiéndose el cuerpo asimétricamente que se ve contrapesada por un giro de la cintura, la mitad superior del cuerpo y la cabeza en dirección contraria, dotando a la figura de un gracioso movimiento. Pureza de medios, simplicidad de las formas y plenitud en el volumen, componen la gramática elemental de su obra.
Abstracto y jovial, la gracia natural de esta pieza no reside en la perfección de sus formas, sino en la deformación de las mismas, en el ensimismamiento ensoñador característico de las esculturas de Lobo.
Este bronce representa un desnudo femenino, eje central en toda la producción del artista. Bronce de la etapa final del escultor, etapa en la que se extraen las pautas básicas de su actuación que definen las vertientes fundamentales de su esplendorosa poética crepuscular. Asume en su totalidad la anatomía del cuerpo femenino, donde se diluyen los rasgos de la cara, con alusión a los modelos arqueológicos del arte ibérico. Figura sentada, piernas dobladas y gesto de la mano; curvas blandas como la que traza un sinuoso y alargadísimo cuello que recoge la esfera de la cabeza dando una gracia particular a esta escultura, enmarcándose en una pose característica de Lobo. El cuerpo gira suavemente con posición ladeada de las piernas, repartiéndose el cuerpo asimétricamente que se ve contrapesada por un giro de la cintura, la mitad superior del cuerpo y la cabeza en dirección contraria, dotando a la figura de un gracioso movimiento. Pureza de medios, simplicidad de las formas y plenitud en el volumen, componen la gramática elemental de su obra.
Abstracto y jovial, la gracia natural de esta pieza no reside en la perfección de sus formas, sino en la deformación de las mismas, en el ensimismamiento ensoñador característico de las esculturas de Lobo.